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Te acaban de asignar un nuevo grupo de trabajo y estás nervioso y motivado: quieres entablar una buena relación con tus colaboradores, que haya un buen ambiente de trabajo, conseguir unos buenos resultados y que se forme un excelente equipo.

Más aún, has pensado en estrategias para lograr todos estos objetivos. Si quieres algo nuevo y divertido, te invitamos a probar con las dinámicas de grupo, con las cuáles podrás conocer a tus colaboradores en un entorno relajado.

Qué son las dinámicas de grupo

Las dinámicas de grupo son actividades en las que las personas se implican para afianzar sus relaciones personales, ya que muchas de estas tienen como eje central el desarrollo de la confianza, la creatividad y la cooperación entre los participantes.

Aunque en principio las dinámicas de grupo se crearon para fomentar las relaciones entre los distintos alumnos de una clase, actualmente se han adaptado a entornos laborales.

Para qué sirven las dinámicas de grupo

El principal objetivo de las dinámicas de grupo es promover la integración entre los miembros de un grupo y aumentar la confianza entre ellos. Por ello, son ejercicios atractivos y divertidos que buscan relajar a las personas que participan en ellos.

Otra de las metas de las dinámicas de grupo es desarrollar la creatividad y la resolución. Esa es la razón, por la que muchas de esas actividades se centran en supuestos diferentes y entretenidos en los que los participantes tendrán que poner a trabajar su pensamiento divergente para resolver los retos que se vayan encontrando.

Cómo preparar una dinámica de grupo

Hay muchas maneras de preparar una dinámica de grupo. Desde el Instituto Europeo de Alta Dirección te recomendamos que antes de pensar en una actividad tengas en cuenta los siguientes parámetros:

  • Cuál es el objetivo: qué quieres lograr con la dinámica de grupo ¿Unir a los participantes? ¿Aumentar la confianza? ¿Elevar la motivación? ¿Desarrollar la creatividad? En función de lo que respondas podrás elegir las ideas que más te convengan.
  • Cuánto tiempo le dedicarás: esto es importante porque determinará cuándo la podrás hacer.
  • En dónde lo harás: no es lo mismo si puedes hacerla en el departamento o en una habitación más grande. Las posibilidades cambian mucho según el espacio.
  • El tamaño del grupo: pocas personas reducen las posibilidades, pero si el grupo es demasiado grande puede dificultarse la coordinación.
  • El entrenamiento previo: esto no es fundamental, pero si lo sabes mejor. Si cuentas con un grupo en el que hay personas que ya han hecho dinámicas puedes plantear juegos más complicados, si no es mejor dejarlo simple.
  • El carácter de cada uno: si ya conoces algunos miembros del grupo esto te podría ayudar, ya que sabrás sus virtudes y defectos, y cómo podrían reaccionar ante una determinada dinámica de grupo.
  • Flexibilidad: por último, siempre has de tener en cuenta que cuando realizamos una actividad con distintas personas esta puede no salir exactamente como la planeamos, por eso debes ser flexible y tener pensado varios escenarios posibles.

Tipos de dinámicas de grupo

Como se ha mencionado, existen distintos tipos de dinámicas de grupo. Para que puedas escoger la que más te conviene te vamos a presentar varias y las dividiremos por objetivos.

Dinámicas para formar grupos

Estas dinámicas se elaboran bajo el objetivo de crear un equipo y aumentar la confianza entre ellos. Son perfectas en el caso de que nos encontremos grupo de trabajo nuevo y queramos que todas las personas se conozcan entre sí y formen un buen equipo.

  • Dos verdades y una mentira: esta dinámica es muy sencilla y no requiere ni de grandes espacios ni de muchos recursos. Se basa en que una persona al azar tiene que exponer 3 afirmaciones sobre sí mismo. Dos serán verdades y una mentira. El resto tendrá que adivinar cuál es la mentira. Te sorprenderán las capacidades de tus colaboradores.
  • Compartir una afición: una excelente dinámica de grupo para fomentar las relaciones entre los miembros del equipo. Para hacerla se necesitará de algunos post-its de colores. Se pide a todo el mundo que anote una afición que tiene y que sea original, porque debe intentar que no se repita. Si esto pasa hay que escribir otra. Después de un minuto cada quien expone la suya.

Dinámicas creativas

Si necesitas fomentar la imaginación para una jornada de trabajo intensa puedes probar con estas dinámicas de grupo.

  • Construir una historia con dado: con unos dados con imágenes y de forma muy rápida, se sitúa un ambiente común. Puede ser un cuento clásico o una hipotética nueva temporada del Juego del Calamar. Da igual si las personas lo han visto o no, el objetivo es crear algo nuevo. Por ello la primera persona debe lanzar 4 dados y utilizar al menos 3 imágenes que aparecen en estos para crear una historia. Las siguientes personas tiene que repetir el mismo proceso enlenzando su historia con la anterior.
  • Exprimir un limón: necesitarás un post-it y mucha creatividad. Cada persona debe dibujar como exprimirá un limón sin utilizar un exprimidor o tenedor. A ver quién se le ocurre la idea más loca.

Dinámicas de motivación laboral

Ideales para empezar a trabajar después de unas largas vacaciones.

  • Exponer algo positivo del día: cómo lo lees, solo hace falta que cada uno diga algo que le pareció positivo ese día.
  • Adivina la canción: para esta dinámica de grupo tendrás que hacer una lista de canciones. Luego, de manera individual, les dices a tus colaboradores que escucharán solo unos segundos de cada canción. Tienen que ser muy famosas para que sean más fáciles de adivinar. Quien las vaya acertando irá pasando a la siguiente ronda. El ganador se llevará el premio que tu decidas.

Si quieres aprender más técnicas de motivación laboral, así como dinámicas de grupo, te aconsejamos que realices el Máster en Gestión y Desarrollo de Equipos. En IEAD queremos ayudarte a consolidad tu carrera.

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